Mi mejor experiencia: Robbin

Muchas personas tratan a los animales como si fueran simples objetos, como juguetes que pueden usar y abandonar cuando les apetezca. Y es que muchas de estas personas no entienden que los animales, las mascotas, deben ser tratadas con el respeto que se merecen y el cariño que les corresponde. 



Para mí, haber tenido la oportunidad de tener una mascota y poder verla crecer, me ha enseñado formas de ver la vida y me ha producido emociones y sentimientos que me han hecho sentir bien. 

Un día como hoy, hace tres años, mis padres nos dieron a mi hermana y a mí una gran sorpresa: llegamos a casa y nos encontramos con un Teckel cachorrito, adorable y con ganas de jugar y comerse el mundo, literalmente. 


Nos encontramos con la posibilidad de tener un pedacito de la naturaleza en nuestra casa, de ver cómo se desarrolla en un mundo de humanos, de darle de comer, dar paseos con él y ver cómo disfruta corriendo por el campo. 

Nos encontramos con la oportunidad de darle todo nuestro amor, abrazarle y quererle como un miembro más de la familia, y es que es uno más. Porque con él nos reímos, nos enfadamos, nos echamos la siesta, salimos de paseo, jugamos, y un largo etcétera. 

Nos encontramos con Robbin, sin duda, una nueva vida que buscaba una familia a la que adorar y a la que acompañar todo el tiempo. 

Es verdad que, en muchas ocasiones, las mascotas, concretamente los perros, pueden resultar un poco desesperantes, ya sea porque ladran mucho, porque no obedecen, o porque no se cansan nunca de correr, saltar y jugar. Pero, a pesar de todo ello, siguen siendo nuestras mascotas, y las queremos tal y como son. 

En ningún momento se me pasaría por la cabeza abandonar a Robbin o portarme mal con él, porque sé que él nunca lo haría, y que siempre va a estar ahí pidiéndome que le rasque la barriga y que le acaricie la cabeza como muestra de su cariño. 

Por todo ello, quiero felicitar a mi perro y darle las gracias por haberme hecho tan feliz todo este tiempo. ¡Muchas felicidades Robbin! Espero poder seguir a tu lado durante muchos años más, disfrutando de tus lametones matutinos y de tus carreras por toda la casa con mis zapatos en la boca para que juegue contigo. Te quiero muchísimo pequeño, me haces feliz infinitamente. 










¡Nos vemos pronto!

Comentarios

Entradas populares de este blog

Alimentos orgánicos vs. alimentos estéticos

Nueva campaña de Youzz: Desperados

Casos reales de maltrato animal: ¿dónde está el límite?